Aragón Liberal (Enviado
por: Emiliano Quílez) , 24/06/07,.- El amor conyugal comporta una
totalidad de entrega, corporal, afectiva, anímica... su éxito es la
perseverancia y la fidelidad... su fruto el amor manifestado en los
padres, hijos, nietos... ¿de eso qué dice la EpC?
Los bienes y las exigencias del amor conyugal
“El
amor conyugal comporta una totalidad en la que entre todos los
elementos de la persona –reclamo del cuerpo y del instinto, fuerza del
sentimiento y de la afectividad, aspiración del espíritu y de la
voluntad- mira una unidad profundamente personal que, más allá de la
unión en una sola carne, conduce a no tener más que un corazón y un
alma; exige la indisolubilidad y la fidelidad de la donación recíproca
definitiva; y se abre a la fecundidad.
En una palabra: se
trata de características normales de todo amor conyugal natural, pero
con un significado nuevo que no sólo las purifica y consolida, sino las
eleva hasta el punto de hacer de ellas la expresión de valores
propiamente cristianos” (FC 13)
¿Verdad que no tiene ningún parecido con los contenidos de la asignatura Educación para la Ciudadanía?.
E.Q.